Wilson Gómez, presidente del Instituto Duartiano, considera que aun cuando se trata de una acción humanitaria, “se requiere de mucha prudencia para evitar cualquier desnaturalización”
Ante la decisión del gobierno de brindar asistencia médica a los policías kenianos que resulten heridos durante su misión de pacificación en Haití, el presidente del Instituto Duartiano, Wilson Gómez, exhortó a las autoridades a “actuar con suma cautela y sopesar muy bien las cosas”.
Gómez considera que aun cuando se trata de una acción humanitaria, “se requiere de mucha prudencia para evitar cualquier desnaturalización”.
“Se sabe que estas acciones siempre entrañan la incorporación de equipos y personal en capacidad de responder a contingencias de esta naturaleza”, explicó Gómez.
La revelación sobre este plan de ayuda médica fue dada a conocer por el canciller Roberto Álvarez ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde dijo que la República Dominicana colaborará con la Misión de Apoyo a la Seguridad en Haití en materia médica.
“República Dominicana apoyará la misión ofreciendo asistencia médica al personal keniano de la MSS en el territorio dominicano. Un aspecto clave para contribuir al éxito de esta”, informó el diplomático en la reunión trimestral del Consejo de Seguridad para dar seguimiento a la situación en Haití.
Sin embargo, el ente duartiano sostiene que se está dejando sola a la República Dominicana, y que el país no puede asumir más carga de la que está soportando. Frente a este panorama calificó de “vergonzosa” la actitud de la comunidad internacional.
“Las grandes naciones y los países que se han comprometido a contribuir con la vecina nación deben honrar sus compromisos, deben brindarle auxilio, cumplir con la palabra empeñada”, puntualizó Gómez.
“Nada justifica que el país se involucre en el conflicto”, declaró Gómez. “La relación con Haití ha sido y siempre será de mucha delicadeza y susceptibilidad, situación que no puede ser obviada”, agregó.
MISIÓN DE KENIA
Un primer contingente de policías kenianos se encuentra ya en Puerto Príncipe en el marco de una misión internacional para restablecer la seguridad en Haití, tras la propuesta de Kenia de enviar mil policías para este cometido. La duración inicial de la misión será de un año.
El despliegue de esta fuerza, en la que también se comprometieron a participar Bangladés, Benín, Chad, Bahamas y Barbados, fue aprobado por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.