El año pasado iniciaron proyecto de construcción de filtrantes, imbornales y registros
Luego de las inundaciones de noviembre de los años 2022 y 2023 que hicieron colapsar el sistema de drenaje pluvial del Distrito Nacional, las autoridades municipales y gubernamentales se han enfocado en el problema que crea incertidumbre entre los residentes en el Gran Santo Domingo.
Desde el gobierno central se dispuso de 230 millones de pesos para comenzar a enfrentar el histórico problema que se ha agravado por las inusuales precipitaciones de hasta 217 milímetros de lluvias en algunas zonas de la ciudad el pasado jueves.
Desde octubre del pasado año la Alcaldía del Distrito Nacional inició el proyecto de Drenaje Pluvial de esta demarcación y para la primera fase proyectó construir 265 filtrantes, 253 colectores y 32 registros y a la fecha se han construido 173 colectores y alrededor de 60 imbornales, sin tomar en cuenta los que ha construido el Ministerio de Obras Públicas. Solo el 30 % de la red vial de la ciudad cuenta con un sistema de imbornales y pozos filtrantes eficiente.
Además de las nuevas construcciones, se trabaja en un plan de limpieza de imbornales, filtrantes y registros en los llamados puntos críticos de la ciudad. Muchos de ellos se vuelven a tapar en poco tiempo por el cúmulo de basura y materiales de construcción que se depositan en aceras y contenes de algunas calles y que son arrastradas a los registros y filtrantes, tapando los sistemas.
Luego de agotar un proceso de licitación, la Dirección de Mantenimiento y Obras Comunitarias de la Alcaldía dividió en cinco los lotes de intervención en los puntos más críticos de la ciudad y estableció un monto de 39 millones de pesos en el primer lote, el segundo 53 millones, el tercero y el cuarto con 48 millones, y el quinto por valor de 42 millones de pesos.
Siguen las inundaciones
Pese al trabajo, la ciudad continúa inundándose como ocurrió el pasado jueves, sin embargo, ahora los charcos duran menos tiempo para eliminarse que antes. El pasado viernes, menos de 24 horas después de las lluvias los charcos habían desparecido.
La situación del tránsito se torna más caótica cuando los charcos se forman en las horas de entrada o salida de la gente a sus puestos de trabajo, universidades, escuelas o cuando hay mayor presencia de vehículos en las calles y avenida por cualquier circunstancia.
La situación no solo afecta a propietarios de vehículos, algunos de los cuales causan desperfectos mecánicos por efecto de las lluvias, sino también a los usuarios del transporte, y a los usuarios del transporte público por calles y avenidas porque muchos de esos vehículos, principalmente carros y guaguas públicas chatarra dejan de ofrecer el servicio.
En la más reciente reunión del Consejo de Gobierno, se aprobó contemplar en el presupuesto del próximo año, como una prioridad, la inversión en la solución del drenaje pluvial de la ciudad, aunque no se especificó el monto de la inversión ni el plan maestro que se ejecutaría.