Messi consiguió un hat trick en poco más de media hora en el último partido de la MLS y Luis Suárez le acompaña con un doblete
El Inter de Miami de Lionel Messi despidió la temporada regular de la MLS por todo lo alto. El equipo entrenado por el Tata Martino venció este sábado al New England Revolution (6-2) con tres goles de Messi, dos de Luis Suárez y uno de Benjamín Cremaschi.
Con dicha victoria el equipo del sur de Florida suma 74 puntos, un nuevo récord en la liga estadounidense de fútbol. El anterior récord, de 73 puntos, lo poseía precisamente su rival de la última jornada, que sucumbió a la exhibición de Messi y Suárez.
El Inter ya se había asegurado hace dos jornadas acabar primero en la fase regular, pero ahora faltan los playoffs para tratar de alcanzar el título más importante, de campeón de la MLS.
La alta cantidad de unidades le supone también al Inter Miami el título de la Supporters’ Shield, entregado este sábado, y, muy probablemente, el acceso al Mundial de Clubes que se disputa el año próximo en Estados Unidos.
Las cosas se le complicaron muy pronto a los de Miami. Transcurrido poco más de un minuto, el argentino Luca Langoni, de 22 años, adelantó a los visitantes en el primer contraataque del partido.
El Inter se volcó y estuvo rondando el empate, pero en el minuto 34, el colombiano Dylan Borrero remató sin mucha fuerza un pase desde la derecha. El portero del Inter, Drake Callender, muy seguro toda la temporada, fue a embolsar el balón, pero acabó colándosele mansamente por debajo de las piernas.
A los 39, Luis Suárez demostró su calidad al hacer un quiebro en el punto de penalti y fusilar de volea a las mallas en una jugada que él había iniciado. Y menos de tres minutos después marcó un golazo tras recibir libre de marca por el lado derecho, acercarse hacia la portería, hacer un recorte y disparar desde la frontal del área, batiendo a de nuevo a Ivaćić, esta vez con un balón raso y potente.
Messi desató la euforia del público solo con salir a calentar al principio de la segunda parte. La segunda gran ovación se la llevó al saltar al campo a los 57 minutos, mientras los aficionados coreaban su nombre. Y en la primera jugada en que participó, con poco más de 30 segundos en el campo, el Inter logró la remontada. Messi adelantó el balón con un pase perfecto a Jordi Alba, que dio la asistencia para que Benjamín Cremaschi marcase el 3-2.
El astro argentino aún tuvo tiempo de redondear el marcador con un triplete. Primero, en el minuto 78, al recibir un taconazo de Luis Suárez, escorarse a su izquierda y cruzar a la derecha desde fuera del área con esa facilidad propia de los elegidos. Tres minutos después, en un mano a mano con el portero tras una asistencia de Jordi Alba en profundidad, un eco de sus jugadas en el Barça. Por fin, en el 89, de volea casi a puerta vacía tras una acrobática asistencia de su socio uruguayo.