El combate femenino entre Katie Taylor y Amanda Serrano se convirtió en la pelea de mujeres más vista de la historia
El enfrentamiento del viernes por la noche entre Mike Tyson y Jake Paul tuvo un gran impacto en todo el mundo.
El gigante del streaming Netflix dijo el sábado que 60 millones de hogares sintonizaron en vivo para ver al YouTuber convertido en boxeador Paul, de 27 años, ganar por decisión unánime a Tyson, el excampeón de peso pesado de 58 años, en el estadio AT&T en Arlington, Texas.
Además, Netflix dijo que 50 millones de hogares en todo el mundo vieron el evento coestelar, en el que Katie Taylor retuvo su campeonato indiscutible de peso ligero femenino con una controvertida decisión unánime sobre Amanda Serrano.
Esa cifra, según Netflix, probablemente convertiría a la pelea en el evento deportivo femenino profesional más visto en la historia de los Estados Unidos.
En comparación, la victoria de los Kansas City Chiefs por 25-22 en tiempo extra contra los San Francisco 49ers en el Super Bowl de la temporada pasada tuvo un promedio de 123.7 millones de espectadores en las plataformas de televisión y streaming, lo que lo convirtió en el programa más visto en la historia de la televisión.
PaulTyson fue el tema de tendencia número uno en todo el mundo en la plataforma X el viernes, con #Serrano en el número dos en los Estados Unidos, Brasil, España y Canadá. La pelea dominó la conversación social, representando once de los once temas de tendencia principales en los Estados Unidos.
Netflix tiene 280 millones de suscriptores en todo el mundo.
La cartelera marcó la primera incursión de la compañía en la transmisión de un evento deportivo en vivo, y no fue perfecta.
Problemas en Netflix
Según el sitio web Down Detector, casi 85,000 espectadores registraron problemas con cortes o transmisión antes de la pelea, lo que llevó a muchos espectadores a expresar sus frustraciones en las redes sociales el viernes por la noche.
“El megaevento de boxeo dominó las redes sociales, rompió récords e incluso tuvo a nuestros sistemas de almacenamiento en búfer contra las cuerdas”, dijo Netflix el sábado.
Si bien el enfrentamiento entre Taylor y Serrano resultó ser la pelea de la noche, el regreso de Tyson al ring a los 58 años hizo que millones de espectadores iniciaran sesión en Netflix un viernes por la noche.
Tanto Tyson como Paul expresaron su agradecimiento un día después.
“Esta es una de esas situaciones en las que perdiste pero ganaste”, escribió Tyson en las redes sociales. “Estoy agradecido por lo de anoche. No me arrepiento de haber subido al ring una última vez. Casi muero en junio. Recibí 8 transfusiones de sangre. Perdí la mitad de mi sangre y 25 libras en el hospital y tuve que luchar para recuperar la salud para pelear, así que gané”, indicó.
“Que mis hijos me vean enfrentarme y terminar 8 rounds con un boxeador talentoso que tiene la mitad de mi edad frente a un estadio repleto de los Dallas Cowboys es una experiencia que ningún hombre tiene derecho a pedir. Gracias”, expresó Tyson.
Tyson sufrió un brote de úlcera en un vuelo de avión durante el verano, lo que lo llevó a posponer una pelea que originalmente estaba programada para el 20 de julio.
Paul agradeció a Tyson por aceptar la pelea.