Trascendió que el recluso escuchaba música a muy alto volumen para que guardias no escucharan gritos de la mujer
Gregorio Matos Carrasco, conocido como Neno, de 29 años, el recluso que mató a su compañera sentimental mientras lo visitaba en la fortaleza La Concepción de La Vega, era un preso que disfrutaba de múltiples privilegios en el centro penitenciario.
Una de esas comodidades, que no debería tener un preso, es un teléfono celular con servicio de internet.
El recluso utilizó el móvil para publicar un video en las redes sociales después de cometer el crimen. En el video, explicó que el audiovisual serviría como evidencia en caso de que le sucediera algo cuando fuera llevado a “la plancha”, un área de castigo para los reclusos que cometen faltas.
Estoy bien, caminando aquí afuera”, dijo Gregorio en el video.