Los últimos soldados franceses en Níger abandonaron la base aérea de Niamey este viernes. El presidente Emmanuel Macron había anunciado su salida en septiembre pasado tras el golpe de Estado del 26 de julio, pero el retiro total tomó tres meses.
El ejército francés tardó tres meses en evacuar a 1.500 soldados y varios aviones de combate que se encontraban en Níger.
Los últimos 50 soldados franceses aún presentes en la base aérea de Niamey abordaron este viernes 22 de diciembre una aeronave A400M de las Fuerzas Aéreas con destino a Francia.
El general Eric Ozanne, comandante de las fuerzas francesas en el Sahel, estuvo en la pista de despegue para devolver el control a las autoridades nigerinas, antes de partir inmediatamente de nuevo hacia Chad, donde está ubicada su plana mayor.
Emmanuel Macron había decidido evacuar a los militares de Níger el pasado 24 de septiembre. “Aunque parezca haber trascurrido con tranquilidad, el retiro fue en realidad muy complejo”, indicó esta semana el general Ozanne a RFI.
“Asumí el mando el día del golpe. Al principio hubo para los soldados franceses dos meses de bloqueo, con las armas preparadas, pero nunca llegamos a un enfrentamiento y salimos de Níger con la cabeza en alto”, detalló.
No fue fácil
“Hacía falta un marco jurídico sólido para salir correctamente, en orden y con seguridad”, precisó el general Ozanne.
Los dos primeros territorios en ser devueltos a las autoridades nigerinas fueron los de Ouallam y Tabarey-Barey, en el norte de Níger, donde estaba estacionado un subgrupo táctico cuya misión, junto al ejército nigerino, era proteger la frontera de Liptako contra las incursiones de grupos terroristas armados.
“La situación que se empezó a vivir a partir del 28 de julio no tiene precedentes, es extraordinaria, en el sentido literal del término”, recordó el jefe de las fuerzas francesas en el Sahel. “Estábamos armados, en nuestras posiciones, cerca las tropas nigerinas junto a las cuales el día anterior combatimos contra los yihadistas.
En noviembre, la aviación compuesta por tres Mirage 2000 y seis drones Reaper abandonaron la base aérea de Niamey. “Durante estos tres meses de retirada no hemos tenido ningún incidente”, señaló Ozanne.
Un puente aéreo regular permitió evacuar a la gran mayoría del personal a Francia. El ejército francés tuvo que sacar sus cargamentos más pesados hacia Chad por tierra.
Para llegar a Yamena, hubo que recorrer 1.700 kilómetros de vías y. Esto se demoró, por cada convoy, diez días de viaje. Ahora serán necesarios seis meses para transportar este material desde Chad hasta el puerto de Douala, en Camerún, para su carga a bordo de buques comerciales con destino a Francia. Se encargarán empresas privadas
“No dejaremos equipos ni capacidades en Níger”
En la base aérea de Niamey, el ejército francés no dejó prácticamente nada. Lo que sí se dejó fueron los edificios prefabricados de construcción modular y los hangares, que se desmantelaron, porque hacerlo hubiera sido demasiado caro.
Después de Malí en 2022, el ejército francés completó así su segunda operación logística de extracción a gran escala en el Sahel. Un verdadero desafío, admiten los militares franceses.
“Lo más difícil es la incertidumbre en la que se han visto sumidos algunos soldados durante los últimos tres meses”, explicó el general Ozanne, al concluirse diez años de presencia militar francesa en el Sahel.
Francia, además, anunció este jueves el cierre de su embajada en Níger, porque ya no puede “funcionar normalmente ni cumplir con sus misiones”.